Testimonio Búsqueda de Vision en Tenerife

4 - 8 DICIEMBRE 2021

Hola. Soy Mayte Crespo . Hice mi primera búsqueda de visión de 4 días en Tenerife siendo guiada por Calmabu. Y he querido contar mi historia porque realmente vale la pena que este retiro antiguo sea hecho y sea conocido. Quiero honrar mi camino pero también los acontecimientos y a la persona que me guió y a mi misma como heroína de esta historia porque realmente se siente así . El reto es duro pero muy, muy hermoso.

Carta a la abuela Calmabu:

Llegué a tí por casualidad. No te buscaba y respondiste a mi llamada en un momento en que me habia quedado sin guía en un cruce de caminos. La conexión contigo fue inmediata. Me diste casa, alimento y me invitaste un Temazcal en tu finca. Allí me hablaste de la búsqueda de la visión que estabas organizando de la cual hacia tres años había oído hablar y ya habia sentido la llamada. Pero por cuestiones organizativas nunca se me dió el momento. Sin embargo, en esta ocasión parecia que el vientre de la Madre Tierra, representado por el inipi del temazcal enrraizaba la experiencia en mi útero y fecundaba este reto de la Búsqueda de Visión en este lugar enTenerife, una isla por la que no sé que sentir por ella, pero que arde en mi interior un fuego que tan pronto me da vida como me quema.

Todo se daría en Diciembre, en el cierre del año. Por cuatro dias en completa soledad en la montaña, por cuatro noches y por cuatro  puertas. De nuevo el 4/4/4 aparecía como una señal.

El tiempo previo a que llegara la Búsqueda, un mes antes,intenté no pensar demasiado en lo que allí sucederia. Confiaba en que si la VIDA así lo habia dispuesto, era porque mi experiencia terrenal habia de pasar por ahí. Me concentré en las instrucciones que me fueron dadas y me ocupé, cuando los niños ya dormian, en hacer mis rezos, un trabajo precioso, de 365 atados de tela y tabaco, uno por cada nuevo dia desde el fin de la Visión y el nuevo renacer, nacer y morir...y así en cada amanecer. Con una velita, incienso y el corazón palpitando y abierto a recibir, intencionaba el nuevo año, sembrando por mi y por todas mis relaciones.

El Tabaco, que habia mezclado con plantas aromàticas y flores, llenaba mis saquitos rojos. Su aroma me revelaba su poder, muy alejado del mal uso que yo hiciera de él en mis años de fumadora social. Unidos por un hilo rojo, el de la Puerta del Este, la de la Humildad que abre el Camino Rojo, hilaba los rezos sin saber lo importante que serían alli en la montaña. Hilando el hilo rojo, el que en el fondo nos mantiene unidos en el Misterio de la Humanidad, llegué y los enrollé con sumo cuidado en mi palo de madera en espiral, hacia el centro del corazón, mientras se acercaba el dia de hacer mi equipaje. Y ese dia llegó: porque todo llega y todo pasa, a través de nosotros, como las nubes de la montaña. En mi equipaje solo lo permitido para este viaje: un saco, una esterilla, una chaqueta, 1 jersey, dos mudas de ropa interior, una bolsa organica pars recoger el papel higiénico y un rollo de papel.

Y llegó el dia: 5 mujeres y un hombre entrábamos en el Temazcal guiado por Calmabu, donde se nos prepararía para subir a ls montaña y donde se nos "quitaria la palabra" hasta la nueva ceremonia una vez de regreso al campamento de nuevo en el Temazcal para compartir nuestra Visión.

Hicimos el Temazcal, recibimos el último trago de agua, y con nuestra mochila, ayudados por los acompañantes, entramos en el silencio interno que duraria 4 dias y 4 noches y un amanecer

Allí arriba cada  buscador es entregado a su proceso de encuentro, supervivencia, entrega, rendición en un lugar apartado: un árbol, tu compañero de viaje, tu aliado, su cobijo, 2*2  metros cuadrados, el cerco que la guia junto con los acompañantes hacen para tí  con los 7 bastones: las direcciones que orientara tu camino ( este/rojo, sur/amarillo, negro/oeste y blanco/norte, y todo el trabajo que hay destrás de cada puerta) y los tres ejes(  padre/ azul, madre/verde y violeta oscuro/ hijo_tu). Y los los límites de tu espacio perdonal, las varillas de tu cerco. Y las 365 rezos colgados que en mi caso representaron mi barrera, la protección de no dejar entrar y apoderarse de mi lo indeseado y de no dejarme salir cuando mi mente se desbocara y quisiera escapar. Ellos seguro que me hablarían y me dirán que aguarde, que me espere. Que regrese al cobijo de mi centro.

El tiempo dió un mayor retó a la experiencia. Dicen que Tenerife llueve poco, pero la vida queria que esta visión nos diera dos dias y una noche de lluvia donde activamos nuestro instinto de supervivencia. Buscar nuestros recursos para permanecer secos, entre mis pocas cosas, una esterilla que mi permitió hacerme una cueva con el árbol y sentada sobre mis cosas esperé con confianza, fe y mucha paciencia a que las nubes pasaran y escuchar en el nuevo amanecer el canto de los tambores de los acompañantes desde el campamento anunciando el nuevo dia.

El dia de regeso, salió un sol precioso y el escenario de inconmendurable belleza reafirmaba la sencillez de la belleza de la vida, con todos sus matices.

En muchos momentos de desesperación quise abandonar porque no encontraba el sentido a ese " sufrimiento elegido". Así lo siente mucha gente sin comprender el sentido de elegir estas especios de piedras, de cuestas, de retos, como motores de aprendizaje. Tuve mucho sufrimiento, no lo niego, pero hubo también momentos mágicos de dejarme envolver y sorprender por la belleza del instante ( una araña, un pajarillo que se acercaba hasta mi saco de dormir y me sacaba una sonrisa, la visita permante de las águilas custodiando la montaña, las gotitas de agua acumuladas sobre una hoja que me permitian humedecerme los labios, la aparición de las estrellas ,  la salida del sol, el sonido del viento. Cuando salia el sol aprovechaba para desnudarme y dejar que su calor entrara por mi piel.

El dia que me recogieron y de nuevo nos metieron en el Temazcal, el tabaco que te devuelve la " palabra", la posibilidad de comer y beber de nuevo ( frutas y agua con flores de Ibiscus) me hicieron sentir que estaba en el Paraíso y bendecida por aquellos dones con lágrimas en los ojos. Y vinieron a mi corazón  todos los hermanos que en esta experiencia en la Tierra han pasado y pasan por momentos de hambre, frio y sed. Los honré por su fuerza y elevé mi último rezo para que los hombres, algún dia, podamos liberarnos de nuestros demonios y mirarnos los unos a los otros con ojos de amor y compasión, dejando de luchar entre nosotros por creer que somos diferentes.

Sé que esto pasará, y que rápido volveré a mis inercias, automatismos, resortes y me olvidaré quizá de agradecer cada gota de agua, cada bocado de alimento, cada amanecer, en honrar a la Madre Tierra que tanto nos da, nuestra madre y al Sol, por cada dia que sale por nosotros sin pedir nada a cambio, ocupada pensando en que algo tengo que hacer más importante

Pero también estoy convencida de que hay experiencias que abren caminos que no tienen vuelta atrás. La puerta del Este, la de la Humildad, es la puerta de la Iniciación al Camino Rojo, un camino de vuelta a la Pachamama, a la tribu, a nuestro clan.  Quienes ya os habéis reconocido, por este u otros caminos, sabéis de que os hablo. No es necesario hacer una Búsqueda para sentirlo, pero si la haces, es imposible no sentir esta conexión con lo que somos.

Y desde la Humildad, escribo estas palabras no para mostrar nada, sino para abrir mi corazón al mundo que llevo dentro.

Y las palabras siguientes de agradecimiento personal en este viaje.

A vosotros acompañantes, por vuestras horas de sueño dando calor y amor al fuego custodio del campamento, vuestros rezos para que las nubes de Tenerife se marcharan, para que la lluvia fuera suave, por vuestros cantos con cada amanecer y cada atardecer que  animaban el espíritu de los buscadores y el camino de regreso a casa.

A los que desde casa me habéis llevados en vuestros pensamientos, gracias porque os he sentido y me habéis nutrido mi sed y mi hambre

A tí Calmabu, mujer valiente, tienes toda mi admiración por sostener tan valiente camino, confiando en los procesos de entrega individual como caminos de vida y superación. La intuición me dice que algo nos ha unido de aquí en adelante.

A mi padre y mi madre, perdón por cada juicio y todo mi agradecimiento a darme Vida a esta experiencia divina en la Tierra.

A tí "K", por quien tanto he llorado estos dias, mi profundo amor, el de una compañera de vida a quien permitiste sembrar el fruto de dos seres maravillos, nuestros hijos. No tengo palabras que expresen mi agradecimiento por todo lo caminado juntos y todo el miedo y el vértigo que ahora siento al ver que nos queda aprender, al menos a mi, a volar sola. Te amo y te deseo el mejor de los caminos ahora por separado, pero igualmente conectados.

A tí P y L, mis seres de luz, con vosotros me acostaba y levantaba cada noche y cada mañana. Mi más profundo apoyo. Allí, como ahora aquí en el avión de retorno a casa, la visión de lo sencillo, de volver a sentir vuestro abrazo, de vernos a los ojos, de reconocer la belleza de la vida a través de vosotros, me impulsaba a no desfallecer, a seguir hasta el final.

Como la película de Alpha que vimos juntos antes de mi marcha, mi camino de regreso a casa y de lucha y crecimiento personal. No os enseñaré nada, porque todo ya está en vosotros. Pero cada pasito que doy, cada piedra que logro sortear, cada capita me logro quitar, sé que me entrega más pura a nuestra relación.

Y a todos los que no os nombro, pero también sois y habéis formado parte de mi vida, gracias y perdón. Por todas mis relaciones, por mis errores, por mis aciertos, estas palabras desde el corazón y en la puerta Roja os las hago llegar.

El ser humano tiene una fuerza inconmensurable. En esta búsqueda de visión a través mio y de mis compañeros vi en nuestros ojos esa fuerza poderosa que, sin explicación, nos impulsa a seguir adelante en los momentos más difíciles. Por qué buscar dificultades cuando la vida ya te las hace llegar por sí misma?

Es cierto, la vida esta llena de claros y oscuros. En los ritos de paso, los que aún sentimos miedo, y no lo decimos con la boca pequeña, aprendemos a soltar, a confiar en la Vida, en lo que Es.

Y nos ayudan a preparnos para las dificultades no elegidas, para recordarnos que dentro nuestro hay una fuerza poderosa a la que siempre nos podemos entregar: la fuerza del amor.

Mente, cuerpo y espíritu. No solo es un camino espiritual. He descubierto, sin saberlo, que es una potente herramienta de sanación. Mi punto débil son los intestinos. Sin pretenderlo, este " barbecho" ha permitido dar paz a mi cerebro emocional, que solo se ha centrado en llenarse de energia, de prana, de vida, de paz. Contrariamente a lo que se puede pensar, en el camino de regreso tenia más fuerza que al comienzo, más ganas de correr, y descalza hacia El campamento, mis pies no sentian dolor, sino enraizamiento, conexión, reconocimiento, sabiendo que la Tierra me devolvia en salud toda mi entrega.

Os prometo que a la salida del Temazcal del fin de la Visión todos nos volvimos más jóvenes, bellos, delgados y llenos de vitalidad y ganas de seguir caminado este incierto pero increíble misterio que es la Vida. Dar es recibir, y la Tierra nos regaló a los buscadores su energia infinita. Ahora toca recordar, no olvidar, aplicar, integrar y regar cada dia esa semilla que somos: de ti vengo y a ti voy, así soy. Pachamama gracias.

Por todas mis relaciones. Permiso para compartir mi testimonio.

Mayte Crespo